La solidaridad es un valor hermoso en los seres humanos, este consiste en brindar apoyo a los más necesitados para crear cambios positivos en el entorno y en las personas.
Erick Werner un joven alemán con apenas 20 años es uno de los participantes del programa voluntariado que realiza el gobierno de Alemania en República Dominicana. Con su trabajo aporta al desarrollo y crecimiento del sector La Guázara en Barahona, en el cual durante todo un año de intercambio cultural ha aprendido y enseñado a los pobladores de dicho sector.
Erick Werner nos comenta que en este país ya son 27 personas las que están trabajando como voluntarios, cada uno con proyectos diferentes como: escuelas, construcción de casas, agricultura y otros trabajos que aporten al desarrollo de los diferentes sectores, a él en particular le gusta trabajar con la agricultura.
Destaca que cuentan con el apoyo de ECOSEBA y del gobierno alemán el cual le suple alimentos además de realizar las gestiones para buscar un hogar donde vivir en casa de familias dominicanas.
“La temperatura en Alemania es muy distinta a la de aquí por lo que la agricultura es muy diferente, actualmente estoy trabajando con un invernadero en la Guázara y solamente tenemos ajíes verdes y rojos, este trabajo se realiza con el favor del sol, el clima y un poquito de agua, además de fertilizantes que ayudan al crecimiento de las matas”.
Expresa que hay mucha diferencia entre una planta de invernadero y una planta de parcela, ya que dentro del invernadero la protección es natural pero forrada en una caseta para que las matas estén libres de insectos, gracias a ese sistema no necesitan utilizar químicos peligrosos.
“Luego de la cosecha vamos al mercado de Barahona a vender los ajíes, también lo compartimos en las casas de la Guázara para el consumo de sus pobladores. Dependiendo de las ventas se escoge el dinero para la producción, no se directamente los precios pero la producción es buena y lo mejor de todo es que esta ayuda al desarrollo de la Guázara porque trae más trabajo de agricultura”.
Erick Werner dice sentirse muy feliz con el trabajo que realiza, primero porque es un desarrollo personal muy bueno y segundo porque de esa manera aporta al desarrollo de La Guázara en Barahona.
Destaca que para él es muy difícil conseguir muchos amigos dominicanos porque a la gran mayoría le gusta el beisbol y el en eso no es muy bueno, sin embargo para entablar un tema de conversación no lo piensa dos veces ya que el dominicano es muy social y diplomático.
“Yo vivo en la Guázara en una casa de familia, considero que las personas con las que vivo son como mis padres dominicanos, realmente me gusta la idea de que los voluntarios podamos vivir en casas de familias ya que es mejor para entender la cultura y aprender la lengua”.
Destaca que lo que más le gusta de República Dominicana es su gastronomía “me gustan mucho las frutas, las comidas que cocinan las dominicanas saben muy bien además de que el arroz de aquí es mejor que en Alemania, me gusta mucho el plátano, el guineo, el arroz con habichuela y arroz con guándules con coco, que es mi favorito, también ayudo mucho en la cocina tanto que ya se hacer algunas recetas como: empanadas, jalao, leche condensada con coco, arroz con habichuelas y plátano frito”.
Ángela Domínguez con quien vive Erick comenta que el moro de guándules con coco es la comida favorita de Erick, expresa sentirse satisfecha tanto ella como su esposo de tener a Erick en su casa ya que es como parte de su familia, “De Erick hemos aprendido que uno no se acuesta sin decir buenas noches y cuando se levanta también decir buenos días, ya que nosotros los dominicanos no hacemos eso con mucha frecuencia, eso lo hemos aprendido de él y es algo que se nos va a quedar para toda la vida”.
Con las experiencias que he vivido aquí reconozco que he cambiado mucho mi forma de pensar y es una experiencia grande para toda mi vida, concluye, Erick Werner.