El embajador de Estados Unidos presentando premio de reconocimiento a la familia Emeterio Sánchez. El hombre que recibe el premio es Héctor Emeterio Sánchez, nieto de Emeterio Sánchez y el miembro más antiguo que sirve de su familia. Las otras personas son bisnietos, grandes bisnietos y cónyuges
El 29 de septiembre de 1916, fue embestido el buque naval USS Memphis en las costas de Santo Domingo, por fuerte oleaje forzándolo a estrellarse con el fondo rocoso del mar y creando una gran explosión. Con motivo del centenario en que naufragó este buque la Embajada de los Estados Unidos realizó un acto conmemorativo para reconocer la valentía y solidaridad de los dominicanos que salvaron las vidas de la tripulación durante el siniestro.
El USS Memphis, un buque de combate blindado, naufragó en la costa rocosa de Santo Domingo el 29 de septiembre de 1916. Un total de 204 marineros resultaron heridos y 40 perdieron la vida. El buque de guerra estaba anclado a 1,000 metros de la costa como parte de la primera intervención de Estados Unidos en la República Dominicana (1916-1922), una acción impopular en este país.
El embajador de Estados Unidos llegando al evento USS Memphis, siendo recibido por Liliana Peralta (L), Director Ejecutivo CDCT, Máximo Iglesias (M), Presidente del Consejo de Administración CDCT, Renaud Anselin, Presidente Quinta Dominica
El acto estuvo encabezado por el Embajador de los Estados Unidos, James W. Brewster y el señor Máximo Iglesias, Presidente de la Junta Directiva del Consorcio Dominicano de Competitividad Turístico (CDCT).
El esfuerzo conjunto de los marines y centenares de civiles dominicanos lograron traer el buque a la orilla y evacuar a más de 700 marineros. Sin la cooperación de la población, muchos más habrían perecido.
El embajador de Estados Unidos hablando en inauguración de “Amistad, Héroes, y el poder del mar” muestra fotográfica histórica en Qunita dominica.
Durante la actividad, el Embajador de los Estados Unidos, James W. Brewster, reconoció a la familia de Emeterio Sánchez, un pescador dominicano que vivía cerca del lugar del suceso y que arriesgó su vida para salvar a varios marineros que se encontraban en peligro ese fatídico día. El diplomático también resaltó los lazos de amistad que existen entre los pueblos dominicano y estadounidense, y recordó las vidas perdidas durante el naufragio.
Al acto se dieron cita otras personalidades del sector empresarial y cultural de la República Dominicana. Los restos del barco formaron parte de la línea costera de Santo Domingo durante décadas, un oxidado monumento al imprevisible poder del mar. Los restos del naufragio fueron desmantelados a finales de los años 30 y el casco restante desapareció lentamente en el mar por los siguientes 20 años. Sólo los recuerdos y fragmentos de metal quedan de esta historia única. Por sus acciones ese día, tres marineros fueron galardonados con el honor militar más alto de los Estados Unidos, la Medalla de Honor: George W. Rud, Claud A. Jones y Charles H. Willey. Rud resultó gravemente quemado y murió ese mismo día. Emeterio Sánchez, un pescador dominicano de 50 años de edad que vivía en la zona, se lanzó al agua, arriesgando su vida para rescatar a varios marineros estadounidenses.